Cada uno de ellos llega algunas celebraciones del año, como las Fiestas Patrias o de final de año, tan aguardadas por nosotros y poco disfrutadas por nuestras mascotas, con ellas llegan las fobias sonoras de los cómplices caninos quienes padecen inconvenientes sentimentales y de conducta como resultado directo del agobio que causa el estallido de cohetes.
Según la American Society for Prevention of Cruelty to Animals (ASPCA), advierte que los petardos y los truenos causan cerca del 20% de las situaciones de animales perdidos, en tanto que en un acceso de pánico, estos cómplices caninos tienen la posibilidad de salir corriendo de su casa o lejos de sus dueños para distanciarse del estruendos o del “riesgo” que ellos están percibiendo; complementariamente a estas cantidades, la American Veterinary Medical Association (AVMA), nos señala que el 15% de los inconvenientes de conducta en perros, suceden como producto de las fobias sonoras, y más allá de que podría parecer que lo que un perro tenga temor a los sonidos que generan la pirotecnia no es enorme cosa, por el hecho de que se le va a pasar en el momento en que deje de escucharles; es requisito comprender que, el encontronazo que generan estos temores, fobias y ansiedades tienen la posibilidad de poner en una situación comprometedora el confort de los perros, aparte de editar su conducta no solo a lo largo de este instante, sino más bien de forma permanente si no se soluciona a tiempo, con lo que es bastante esencial proporcionarles atención veterinaria en un corto plazo para brindarles alivio.
¿De qué manera aliviar a un perro asustado por cohetes?
La neurociencia cognitiva ha creado herramientas concretas para tratar la fobia de los perros, estas terapias son continuas y necesitan el acompañamiento de un especialista.
Pero para atenuar el temor de tu perro estos días de fiestas los veterinarios aconsejan:
¿De qué manera debo accionar?
- Entre los hábitos que debemos eludir (y que siempre y en todo momento hacemos), es acariciar a nuestro perro para procurar calmarle. Pero esta conducta genera el efecto opuesto a nuestra mascota, en tanto que cuanto mucho más acariciamos mucho más va a pensar que el estruendos que escucha es arriesgado -«De ahí que me resguardan»- Va a pensar. Es preferible mimarlo en el momento en que se haya calmado para remarcar esta buena conducta.
- Lo habitual es que el perro busque un refugio donde se sienta seguro. Déjalo. Lo destacado es dejar que se oculte donde desee y no procurar sacarlo por fuerza de su refugio. Si andas en el hogar, cierra las ventanas a fin de que el estruendos se oiga lo menos viable y el animal se sienta mucho más seguro.
- Sosiégate tú primero. Si tu perro ve que tu accionar es frecuente y te ve relajado, es viable
Sí, pero con bastante trabajo y paciencia.
Infartos, atropellos y mucho más
Cualquier persona que tenga o haya tenido perro va a haber podido revisar la ansiedad que piensa para estos animales presenciar una traca de cohetes o aun un fácil petardo o lámpara .
Es verdad que ciertos se quedan impertérritos frente a la escena; no obstante, según un análisis de la Facultad de Bristol, precisamente el 50% de los perros urbanos entran en pavor tras la mucho más mínima explosión. Según el neurobiólogo experto en accionar canino Gregory Berns, esto se origina por que los perros no tienen la aptitud de racionalizar la ansiedad, como podría realizar un humano, con lo que padecen una manera mucho más intensa de terror. El resultado sería una sintomatología afín al trastorno por agobio postraumático.
Los perros tienen un enorme sentido de la empatía y no solo advierten nuestras conmuevas y estados de ánimo, sino los adoptan. Si muestras una actitud inquieta o brusca, ellos tienen la posibilidad de verse igualmente desequilibrado. De ahí que es esencial no solo accionar de manera calmada, en movimientos, movimientos y tono, sino más bien asimismo eludir un accionar excepcional o inquieto.
Ten en cuenta que el temor es una emoción, y que se manifestará de manera diferente a cada animal. Cada perro precisará cosas distintas. Quizás necesite que estés con él, que le acompañes o acaricies o quizás prefiera ocultarse en la bañera. Sea como sea lo debes proveer. Si se posibilita adoptar su estrategia preferida le va a ser mucho más simple volver como estaba.5