El primer consejo que te vamos a dar, es lo más esencial, y lo destacado para comprender cuáles son las mejores prácticas y sugerencias estacionales, es tener la asesoría de tu Médico Veterinario de seguridad; es el profesional de la salud animal quien te va a poder señalar de qué forma tienes que cuidar de tu mascota cada temporada del año.
Además de esto, en invierno, el Veterinario va a deber revisar que las vacunas de tu perro estén cada día y además de esto comprobará la salud generalmente de tu mascota y de esta forma va a poder decirte si el tuyo cómplice canino puede o no puede ofrecer paseos en invierno, tal como los cuidados.
No hay una regla establecida para el número de paseos y la duración que precisa un peludo. Es requisito estudiar a cada perro para entender sus pretensiones. Te enseñamos a ordenar el recorrido según el género de peludo que poseas.
Una cuestión que siempre y en todo momento se ha discutido y que mucho más puede cambiar entre un amo y otro es la proporción de paseos diarios que se le da a un perro y su duración. La verdad es que no hay una cantidad ni una duración general para todos y cada uno de los pilosos. Probablemente, lo destacado sea amoldarse al perro según la edad, las condiciones físicas y la manera de ser.
Si tienes un cachorro, lo mucho más seguro es que tu veterinario te haya dicho que no puede pisar la calle hasta el momento en que se concluya el calendario de vacunas. Es una cuestión de salud, puesto que podría contagiarse de alguna patología oliendo los restos de caca de un perro enfermo, por poner un ejemplo.
Fija las reglas de convivencia desde el comienzo (pero sé tolerante)
Es esencial dejar visibles desde el comienzo las cosas que no deseas que tu perro realice en el hogar, los sitios donde escoges que no entre, etcétera.
No charlamos ahora de mear o defecar en casa (un tema con el que asimismo deberás proteger y para el que te aconsejamos preguntar nuestro producto de qué forma instruir a un cachorro a realizar sus pretensiones en la calle) , sino más bien de cuestiones como escalar a la cama o al sofá, subirte encima de ti, soliciar comida de manera insistente, etcétera.
El perro en tu habitación
A ciertos dueños no les molesta comunicar habitación con sus mascotas pero es esencial que habitúes a tu perro a reposar fuera. Si se queda fuera llorando, no reacciones, en tanto que si lo consolas solo lograrás remarcar su llanto. Y jamás le dejes ingresar en tu habitación por su cuenta o subirte a la cama sin que lo hayas invitado. Debes instruirlo y cerciorarte de que espera con tranquilidad que le des permiso. En caso contrario se va a tomar mucha seguridad suponiendo que él tiene el poder.