Ratonero Holandés

El Ratonero Holandés, también conocido como Hollandse Smoushond, es un perro de compañía alegre, activo, fuerte y de estructura cuadrada. Compacto y robusto, esta raza originaria de los Países Bajos se caracteriza por su pelo áspero y su temperamento amigable y espíritu libre. Originalmente popular entre la clase media alta en los Países Bajos, era conocido por seguir los carruajes y caballos y como cazador de ratas en los establos.

Historia y Origen

A mediados del siglo XIX, el Ratonero Holandés era muy popular en los Países Bajos, especialmente como cazador de ratas en los establos. Su origen, aunque incierto, se cree que incluye al Schnauzer amarillo entre sus ancestros. La raza, después de un periodo de declive, fue revitalizada en 1973 por iniciativas destinadas a reconstruir su población.

Clasificación FCI

El Ratonero Holandés está clasificado en el Grupo 2, Perros tipo Pinscher y Schnauzer, Molosoides y perros tipo montaña y boyeros suizos, Sección 1.3 Tipo Pinscher y Schnauzer, sin prueba de trabajo. Esta clasificación refleja su utilidad histórica y su adaptabilidad como perro de compañía.

Aquí puedes consultar su ficha.

Características Físicas

Tamaño y Peso

  • Machos: Altura a la cruz aproximadamente de 37 a 42 cm.
  • Hembras: Altura a la cruz aproximadamente de 35 a 40 cm.

Peso

  • Peso: Entre 7 y 11 kg para ambos sexos, variando de acuerdo con la altura, dieta y nivel de actividad.

Esperanza de Vida

  • Tiempo de esperanza de vida: La esperanza de vida del Ratonero Holandés (Hollandse Smoushond) suele estar en el rango de 12 a 15 años.

Aspecto General

De pelo áspero, alegre, activo, y fuerte, el Ratonero Holandés es compacto y robusto, con un cuerpo que puede ser ligeramente más largo en las hembras.

Temperamento y Comportamiento

El Ratonero Holandés es conocido por ser afectuoso, alegre, amigable y de espíritu libre. Por naturaleza es dispuesto pero no nervioso o sobre activo, ni fácilmente asustadizo.

Salud y Cuidados Específicos

Siendo generalmente saludable, esta raza requiere de cuidados regulares típicos de cualquier perro, incluyendo ejercicio moderado, una dieta balanceada y chequeos veterinarios periódicos.

Entrenamiento y Socialización

Con un temperamento vivaz y una disposición alegre, el Ratonero Holandés responde bien al entrenamiento positivo y se beneficia enormemente de la socialización temprana.

Consejos para Futuros Propietarios

Este perro es una excelente adición a la mayoría de los hogares gracias a su tamaño manejable, su carácter amigable y su adaptabilidad.

Conclusión

El Ratonero Holandés es un compañero leal y alegre, ideal para aquellos en busca de un perro de compañía con un espíritu vivaz y amigable. Su historia como cazador de ratas y compañero de los carruajes en los Países Bajos es un testimonio de su utilidad y carácter adaptable.